No lo sabrás si no lo intentas

Fill my head with the future 

Fill my eyes with the sky 

Whole of my life I've been left behind 

But I've never felt more alive

Hay gente que te dice con toda la ligereza del mundo: Ya hay muchos libros, ¿para qué más libros? O ya hay muchas canciones, ¿para qué más canciones? Bueno, a menudo me encuentro en ese punto del noctambulismo en el que acepto que es una locura seguir despierta, así que me acuesto, lo intento, me acuesto para dormir y no puedo. Necesito escuchar cierta música. Exploro mi ipod de arriba a abajo y de abajo a arriba, y miro mis discos, y pienso en los millones de gigas de música gratuita que tengo a mi disposición gracias a la internet, toda para mí, pero de nada me sirve porque llego a la conclusión de que lo que yo necesito escuchar en ese momento es nada más ni nada menos que el segundo álbum de The La's.

El segundo álbum de The La's no existe. ¿De qué me sirve que haya tanta música, tantas canciones, cuando lo que yo quiero escuchar es el segundo álbum de The La's? ¿De qué me sirven Mozart, Los Beatles, Bowie y la discografía completa de Bob Dylan con bootlegs incluídos? Todos ellos están muy bien y llenan muchos espacios en mí, pero no pueden llenar ese espacio. ¿Me explico? No pueden.

Del mismo modo a veces me encuentro con que no hay una canción para lo que siento, o con que hojeo un montón de libros pero no encuentro el libro que realmente quisiera leer, porque esas canciones y esos libros tampoco existen. Tienes que hacerlos tú. Y no es fácil, claro. Pero puedes intentarlo. Además, puedes correr con la suerte de que alguien no lo haga por ti, pero se acerque, o llene espacios que la música y los libros que ya existían no habían podido llenar, o mejor aún, puedes correr con la suerte de encontrarte con alguien que abra y llene nuevos espacios al mismo tiempo. Sí, eso último es lo mejor de todo. A mí me pasó con Jake Bugg. Creo que estaba esperando a que alguien compusiera sus canciones. No es que necesariamente sean las mejores canciones del mundo, o las que vayan a salvar a la música moderna de su atasco. Tampoco es que sean absolutamente originales o radicalmente distintas a todo lo que ya había escuchado (¿quién está libre de influencias?). Es que es la música que yo necesitaba escuchar desde hacía mucho tiempo y no me había dado cuenta. Es que ya había millones de canciones pero ninguna que hablara de ese sabor agridulce. Es que acaso ya se ha dicho todo, pero no se había dicho así.